FEEDA (la Federación Empresarial Española de Ascensores), nos recuerda que aún existen más de 5 millones de edificios que no están dotados de accesibilidad para las personas que así lo requieren.
A pesar que ya se cumpliera el plazo que se dio por el Real Decreto Legislativo de 2013, en el que se aprobó el Texto Refundido de la Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social, con tal fin de cumplir las condiciones básicas de accesibilidad, tanto en edificios privados como públicos, en España, nos encontramos con que muchas de las edificaciones, más de 1 millón de estas, fueron construidas antes del año 1981, y no tienen ascensor.
A día de hoy, la FEEDA, considera que: “el ascensor no es un lujo, es un medio de transporte necesario para quienes viven en edificios de viviendas y no lo tienen. Las personas mayores y con movilidad reducida son quienes más necesitan un elevador para poder salir de su casa y disfrutar de una vida con libertad. Pero todos nosotros, en un momento determinado, necesitamos un ascensor basta una torcedura de un tobillo, una intervención quirúrgica o tener un bebé para que la falta de un elevador complique más de la cuenta el acceso a la vivienda”.
En muchas construcciones posteriores al 1981, el problema de accesibilidad se encuentra, en las escaleras que hay antes de llegar al ascensor.
En la actualidad, la población es cada vez más longeva, muchas personas mayores de 70 años, no pueden salir de sus viviendas porque no son accesibles. A estas personas hay que sumar, además, aquellas que padecen alguna discapacidad (Actualmente, según fuentes del Instituto Nacional de Estadísticas, hay 3,8 millones de personas discapacitadas). Y hay que tener en cuenta también las personas que puedan tener una discapacidad temporal, como puede ser por romperse una pierna o por alguna operación, etc.
Por todo ello, la FEEDA, solicita “actuaciones conjuntas de todas las administraciones, empresas y comunidades de vecinos para hacer frente a esta situación que impide la movilidad y el desarrollo de una vida con libertad a millones de personas”.
Y de esta manera poder eliminar las barreras arquitectónicas y crear así, entre todos, un mundo accesible.
